08 agosto, 2007

La rebelión de los empresarios

Revista Qué Pasa
NEWSLETTER | Edición sábado 4 de agosto de 2007

  

Todos los dardos empresariales hoy apuntan al ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade. Se le reprocha ser un promotor de las negociaciones multisectoriales y le critican "una actuación ambigua" en el caso Codelco. Por eso habló esta semana Eliodoro Matte y por eso el miércoles 25 de julio se vivió una tensa reunión en la Sofofa. Los asociados criticaron la actuación de Andrade y, en privado, se quejan por cierta parsimonia de Bruno Philippi a la hora de hacer públicas las molestias de los gremios. Una vez más el mensaje del timonel de la Sofofa fue que confíen en la presidenta.

Por  Myriam Mellado y Lorena Ampuero
Foto  Mabel Maldonado
 

El martes pasado, Eliodoro Matte asistió a la entrega del premio Visión Empresarial que le otorgó la Asociación Chilena de Seguridad. Su entorno más cercano sabía de antemano que el presidente de la CMPC aprovecharía la tribuna para, como pocas veces, romper su bajo perfil público y alzar su voz lanzando una dura crítica al clima antiempresarial que a su juicio hoy existe en Chile. "Apenas le dijeron que debía hacer un discurso, tuvo claro que se referiría a los dos temas más candentes del momento: el ambiental y el laboral".

"Noto que hay muchos actores de la vida política que frente a la ocurrencia de problemas laborales o ambientales de determinadas empresas, favorecen con sus declaraciones un clima antiempresarial, sin al menos hacer los necesarios distingos", dijo Matte.

Entre la concurrencia lo observaba otro de los invitados al evento: el ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade. En él se han centrado en los últimos dos meses las fuertes críticas de los gremios empresariales que le endilgan promover la negociación interempresas, actitud que se habría visto reflejada en su postura frente a la huelga de los contratistas de Codelco, un hecho que para los hombres de negocios podría sentar "un nefasto precedente".

Andrade, a quien le tocó hablar después de Matte, rehuyó la controversia y se remitió a destacar la importancia del diálogo entre trabajadores y empresarios. El ministro sabe que estos últimos lo tienen en la mira. En privado, muchos de los hombres de negocios dicen que esperan su salida del gabinete.

De hecho, la actuación de Andrade fue el comentario central en una de las más agitadas reuniones que ha tenido la Sofofa en el último tiempo. El miércoles 25 de julio se vivió el preludio de lo que vendría después con las declaraciones de Eliodoro Matte.

Miércoles tenso

Como todos los últimos miércoles de cada mes, el Consejo de la Sofofa se reunió en el edificio del organismo gremial para revisar los temas que están en la agenda noticiosa y que le incumben.

A las 17.30, el timonel Bruno Philippi dio el vamos. Siguiendo la tradición establecida por este último habría un invitado. En esta ocasión, el expositor sería José Pablo Arellano, director ejecutivo de Codelco. Sin embargo, el conflicto que arrastraba la cuprífera con sus trabajadores lo obligó a suspender la cita.

Philippi entonces les explicó la situación a los asistentes -que bordeaban las 60 personas- y aprovechó de expresar su preocupación por la forma en que se estaba interpretando la ley laboral.

Específicamente, señaló que era contrario a la negociación interempresas. Cercanos a Philippi han señalado que "al sentarse Codelco en una mesa con trabajadores de sus contratistas validó una instancia que no está contemplada en el mercado legal chileno, dejando un precedente peligroso para otras negociaciones".

Esto fue suficiente para que el resto de los asistentes se alineara con la preocupación del timonel. Específicamente los representantes de las grandes empresas tomaron la palabra y lanzaron sus dardos contra la forma en que el gobierno, en general, y Andrade, en particular, han manejado el tema laboral.

Gonzalo García, secretario ejecutivo de la CMPC; Alfonso Swett, dueño de Forus; Jorge Matetic, propietario de Carnes Ñuble e Inchalam; y Nicolás Abumohor, ligado a SN Holding (Parque Arauco, Puerto Velero, Balthus, entre otros), fueron algunos de los que expresaron abiertamente -y duramente, según asistentes- su malestar.

La mayoría coincidió con el análisis de que "hay una acción dirigida por alguien para establecer la negociación por área". Otros consejeros criticaron lo que ellos llaman "un discurso ambivalente" de Andrade y de cómo la postura de éste influía, por ejemplo, en los secretarios regionales ministeriales del Trabajo. Además le endilgaron que se manejaba con una "agenda propia", bien distinta, por ejemplo, a la de su subsecretario, Zarko Luksic. Pero, sobre todo,  el malestar se centraba en el rol y la postura que tuvo Andrade en el conflicto de Codelco.

"Es cierto: lo miramos con suma desconfianza", dice un directivo de un organismo gremial.

Abogado de profesión y militante socialista, Andrade se ha dedicado por 30 años a asesorar sindicatos. Ha sido crítico de la ley de subcontratación y de la flexibilidad laboral. Desde que asumió en el gobierno validó el movimiento sindical, lo que se reflejó en el caso Codelco, al impulsar el diálogo entre los trabajadores subcontratados y la firma.

Ya en abril de 2006 el primer punto de inquietud entre los empresarios era el proyecto que regula la subcontratación laboral porque rigidizaba el mercado del trabajo, perjudicando a las pymes y por sus posibles efectos sobre el desempleo.

"El ministro ha interpretado la ley de subcontratación a su entero antojo", dice un consejero de la Sofofa. Y esto es un síntoma grave para los empresarios, que aprovecharon esta reunión para expresar su desconfianza.

La postura de Philippi

El timonel de la Sofofa escuchó las críticas de sus asociados. En su entorno explican que la molestia y el tenor de las opiniones no es de extrañar: "Si organizas una reunión donde hay más de 10 empresarios, el tema obviamente que va a salir y también es obvio que se armará un debate candente".

Según cuenta un asistente, Philippi una vez más puso paños fríos a la molestia frente al gobierno y específicamente defendió la actuación de la presidenta Michelle Bachelet y pidió confianza en su gestión.

"Nos dijo que Bachelet había heredado de Lagos una ley de subcontratación bien deficiente y que se la había jugado por vetarla y que al final logró cambiarla para mejor", dice el miembro de un organismo gremial.

Además, según esta fuente, les dio a entender que había que separar aguas entre Andrade y Bachelet y que esta última más que formar parte del problema, formaba parte de la solución.

"Bruno nos trató de decir que pese a que muchos creían que ella titubeaba y era vacilante, al final, nos dijo, 'siempre atina'".

La postura de Philippi nuevamente ha sido blanco de críticas por algunos miembros de la tribu empresarial, que más de alguna vez le han enrostrado su escasa figuración pública y parsimonia a la hora de defender los intereses del sector y su cercanía con los últimos dos gobiernos de la Concertación.

"Bruno tiene como política escuchar a todos y propende al consenso...ahora no sé si estará esperando que la Virgen del Carmen lo ayude", ironiza un consejero ligado a la industria.

De hecho, otro consejero, del sector alimenticio, dice que ante el silencio público de Philippi, las palabras de Matte fueron un alivio. "Por fin alguien se atrevió a decir lo que pensamos. Y cuando Matte habla es porque el escenario está muy complicado". Por eso, al término de la ceremonia del martes pasado en la ACHS, la reacción de los asistentes a la advertencia de Matte no se dejó esperar: varios se acercaron a felicitarlo por su intervención.

El entorno de Philippi precisa que la  cúpula de la Sofofa es "más bien escéptica frente a los dichos de Andrade, que se ha desligado de los conflictos entre empresas y trabajadores" y consideran que la situación que hoy se está dando es ilegal. Frente a las críticas por la escasa figuración y el mutismo del timonel, esgrimen que la vocería del gremio empresarial radica en Alfredo Ovalle, presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC). "En él se han canalizado las demandas. Ahora, por cierto que informalmente siempre existen canales e instancias que sirven para que la Sofofa le haga ver al gobierno su inquietud por ciertos temas".

Los Luksic también se mueven

Para miembros del consejo de la Sofofa lo cierto es que "hay en Chile un antes y un después del caso Bosques Arauco".

Este conflicto comenzó a dibujarse a mediados de marzo pasado. Entre el 12 de ese mes y el 8 de mayo se llevó a cabo la negociación sindical de los contratistas de Bosques Arauco con Celco, del grupo Angelini. A juicio de varios empresarios esto sentó un precedente importante, porque finalmente negociaron trabajadores y empleadores en distintos niveles. O sea, los subcontratistas lograron nada menos que poner en la mesa la negociación interempresa algo prohibido desde hace 30 años.

Esta experiencia ayudó para que los 12 mil contratistas de la Confederación de Trabajadores del Cobre se lanzaran con todo para que accedieran a sus peticiones. En la práctica las casi cuatro semanas de negociaciones con Codelco implicaron también airadas protestas, tomas de caminos y pérdidas por US$ 100 millones para la cuprífera. 

Por eso, Matte en su discurso de seis páginas del martes pasado, señaló que "últimamente hemos sido testigos de una decidida acción de agitación laboral tendiente a promover por la vía de los hechos cambios en la legislación laboral (?) presionar a las empresas mandantes para que se sienten a negociar con trabajadores de contratistas, junto con ser un procedimiento ilegal es altamente inconveniente para el sano desenvolvimiento de la empresa (?)".

El miércoles 25 en la citada reunión de la Sofofa, un cercano a la Papelera expresó una fuerte crítica por el clima laboral porque, a su juicio, en los casos de Codelco y Bosques Arauco "se están vulnerando las normas legales sobre la subcontratación y eso produce un tremendo caos", señaló a sus pares.

La espiral que se podría producir como réplica de Codelco ha puesto en alerta al mundo empresarial. El martes pasado, al unísono del discurso de Matte, la CPC se reunió con Andrade a puertas cerradas. A la salida del encuentro, Alfredo Ovalle, titular del ente gremial, dijo que les había quedado claro "que no está en la agenda del ministerio la negociación interempresas".

Ya el martes 24, Jean Paul Luksic, presidente de Antofagasta Minerals y vicepresidente del Consejo Minero, le presentó, en una reunión privada, sus reparos al secretario de Estado sobre cómo se estaba llevando el proceso de negociación de Codelco y el temor de que esta fórmula se transformara en una situación habitual. En la cita argumentó que una escalada de demandas salariales podría afectar la competitividad de la industria a futuro cuando los precios del cobre bajen.

¿Qué pasará en este conflicto? Entre los empresarios de la Sofofa hay desconfianza. Afirman que "Andrade es un fabricante de conflictos". Y temen que su actitud genere incertidumbre en las inversiones. "No hay un lineamiento claro en el gobierno, más aún considerando que el caso Codelco se desarrolló en el marco legal vigente", reconoce un ejecutivo del área minera.

Además existe el temor de que la situación se irradie a otros sectores, como el retail.

Andrade, por su parte, tras su reunión de esta semana con la CPC fue lacónico: dijo que le había servido para aclarar "malentendidos que se suscitan".


No hay comentarios.: