11/09/2006 | Actualizada a las 10:00h
Pekín. (EFE).- China dejará a un lado los controles administrativos macroeconómicos y optará por medidas económicas y legales para enfriar la economía en la segunda mitad del año, dijo el viceprimer ministro Zeng Peiyan, según publica hoy el diario South China Morning Post.
La prioridad del Gobierno será frenar la inversión en activos fijos, dijo Zeng, lo que indica que Pekín podría optar por subir de nuevo los tipos de interés o los requisitos de reservas de los bancos en lugar de decantarse por otras medidas. "Intentaremos depender menos -o nada- de las medidas administrativas y usar principalmente medidas económicas y legales", afirmó el viceprimer ministro.
Zeng afirmó que el crecimiento económico chino había sido "relativamente rápido" este año, aunque la situación general era buena, con una mejora en el empleo y la eficacia empresarial, mientras que la inflación se había mantenido moderada. Durante los primeros ocho meses del año, el Indice de Precios al Consumo se había mantenido en el 1,2 por ciento, reveló el funcionario.
"Tomaremos medidas para ajustar de forma apropiada la oferta de dinero y el crédito, y para absorber el exceso de liquidez en el sistema bancario", explicó.
Con este fin, Pekín optó durante la primera mitad del año por subir el coeficiente de caja de los bancos en un uno por ciento y los tipos de interés en 0,54 por ciento.
"El mercado tendrá un papel muy importante" en la regulación del crecimiento económico, reconoció Zeng, quien reveló que el Gobierno tendrá que mejorar el mecanismo de tipo de cambio para favorecer esta influencia.
La prioridad del Gobierno será frenar la inversión en activos fijos, dijo Zeng, lo que indica que Pekín podría optar por subir de nuevo los tipos de interés o los requisitos de reservas de los bancos en lugar de decantarse por otras medidas. "Intentaremos depender menos -o nada- de las medidas administrativas y usar principalmente medidas económicas y legales", afirmó el viceprimer ministro.
Zeng afirmó que el crecimiento económico chino había sido "relativamente rápido" este año, aunque la situación general era buena, con una mejora en el empleo y la eficacia empresarial, mientras que la inflación se había mantenido moderada. Durante los primeros ocho meses del año, el Indice de Precios al Consumo se había mantenido en el 1,2 por ciento, reveló el funcionario.
"Tomaremos medidas para ajustar de forma apropiada la oferta de dinero y el crédito, y para absorber el exceso de liquidez en el sistema bancario", explicó.
Con este fin, Pekín optó durante la primera mitad del año por subir el coeficiente de caja de los bancos en un uno por ciento y los tipos de interés en 0,54 por ciento.
"El mercado tendrá un papel muy importante" en la regulación del crecimiento económico, reconoció Zeng, quien reveló que el Gobierno tendrá que mejorar el mecanismo de tipo de cambio para favorecer esta influencia.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario